¿Sabías que las lesiones por presión son catalogadas como problema de salud pública en Latinoamérica?
Llamadas también como la epidemia silenciosa es uno de los principales problemas generados en los hospitales, hogares y centros geriátricos.
Son conocidas también como escaras por inmovilidad. Son heridas que aparecen en la piel por una situación de encamamiento y se produce cuando disminuye el riego sanguíneo en un sitio de apoyo. Avanzan rápidamente cuando el cuerpo se encuentra en una misma posición por un periodo mayor a dos horas y en caso de profundizarse pueden llegar a generar complicaciones o incluso la muerte.
El rango de personas afectadas es amplio, desde personas mayores, en sillas de ruedas, enfermos crónicos y bebés prematuros.
Los estudios demuestran que el 95% de estas heridas se pueden prevenir, sólo es importante conocer cómo se generan y aplicar los cuidados más eficaces para conseguirlo.
Es por eso que el 21 de noviembre nos unimos en la Jornada Mundial de la Prevención de las Úlceras por Presión. A continuación, te damos algunos tips de prevención:
Revisa toda la piel diariamente, busca enrojecimientos en áreas de mayor apoyo y evita apoyar nuevamente a la persona sobre esta área.
Una de las mejores formas de prevenir las lesiones por la presión es ayudar al paciente a cambiar de posición tan frecuente como sea posible o mínimo cada 2 horas. Durante el día y la noche.
Mantenga la piel limpia y seca, haga énfasis en los pliegues de piel con mayor sudoración.
La alimentación es importante en la resistencia de la piel. El consumo de proteínas como carnes y huevos previene la aparición de lesiones.
Evite el uso del pañal ya que puede favorecer la oclusión y daño de la piel.
Estimule el autocuidado y las actividades que el paciente pueda realizar por sí sólo.
No haga uso de perfumes sobre la piel, estos pueden resecarla.
No use flotadores o cojines en forma de rueda al sentar al paciente, este puede favorecer la aparición de lesiones.